Feliz cumpleaños iluso, no te creas que eres mas que nadie por haber llegado a la conclusión de que somos un cáncer en nuestro mundo, una pequeña anomalía en nuestro universo con un principio y un final, una singularidad que en el computo de tiempo global del mismo no equivaldrá a nada!, ni tan siquiera a un átomo de hidrógeno dentro de nuestro Sol. ¿A que equivale entonces un segundo de nuestra vida?. Podría enumerarte tantas vivencias, tantas sensaciones, tantos buenos y malos momentos que sin lugar a dudas se irán perdiendo en el tiempo y dejarán de ser procesados por una máquina biológica mermada en capacidad en su senectud.
No es momento de hacer balance, unas puertas se cierran a la vez que otras se abren como si un mecanismo invisible las accionase, por eso a veces sientes que estas viviendo una vida artificial, prefabricada, ¡no puede haber tantas interconexiones a no ser que hayan salido de la mente de un guionista!, y te dices "mi vida es una comedia", solo hace falta ponerle la música; no ¡espera!, la he estado escuchando todo el tiempo. Es entonces cuando te vienes arriba y le sacas jugo a cada situación cotidiana. Es solo cuestión de actitud.
Pero ¿que es la vida?, ¿un conjunto de momentos que han pasado de los que recordamos pequeños fragmentos y sensaciones?, quizá si, y en nuestra mente solo queda un collage de trocitos valiosos con el que hemos armado nuestro pequeño mundo interior, nos sentimos tan cómodos recordándolos, por eso los buscamos con tanto anhelo, somos unos adictos a los pequeños "sugus" que nos regala el corto tiempo que vivimos.
Te voy a regalar a ti, cumpleañero, y a los que leéis esto unos pequeños retazos de recuerdo, unos "sugus" light.
Una día de Abril, sobre las doce de la mañana, una pequeña brisa recorre la arboleda, el aire trata de jugar con las copas de los árboles, se escucha alguna hoja caer por su fugaz ímpetu, también el canto de los pájaros, rítmico, una algarabía dulce, un concierto vocal para ti solo, nunca lo has escuchado tan claro y poco a poco los cantos se van acallando, no porque desaparezcan, sino porque los vas integrando en tu mente y prestando atención a otros sentidos. Tu mano está apoyada en el tronco de un álamo, ahora notas su rugosidad, mueves tu mano y esa rugosidad te produce un cosquilleo, cierras los ojos y te das cuenta de que estas inmerso en la primavera porque se huele, esas yemas tiernas en los brotes de los árboles están a punto de abrirse al mundo, de eclosionar, un olor dulzón envuelve el ambiente. Escuchas el agua caer, un chorro brota entre unas rocas a tu lado, el murmullo que hace el agua al caer tiene un significado místico, es el comienzo y el fin de ese color verde, la vida de todo aquel lugar es el fruto de ese manantial, de ese líquido elemento que emerge de la tierra después de un largo viaje por el subsuelo, de la profundidad de las cárcavas, de lo mineral, de lo inerte.
